Quiénes Somos

YO LO INTUÍ DESDE EL PRIMER DÍA

Nunca me olvido de aquellas frases que repetía mi padre: “Los estudiantes sobresalientes se pueden identificar en más o en menos, en dos grandes grupos: los instintivamente inteligentes, dotados sabiamente y que aún, sin mayor empeño, asimilan y aprenden los distintos temas enseñados y aquellos que sin tener esos dotes -que otorga, quién sabe por qué,  la madre naturaleza-, se esfuerzan incesantemente y de tal manera que llegan a competir de igual a igual con quienes en principio, pareciesen intelectualmente superiores”. Mi pregunta, siempre fue la misma: Papá: ¿Y si se conjugasen ambos méritos: el inteligente que se esfuerza? Esa es LA EXCELENCIA, respondía sin vacilar.

… Bajo esas enseñanzas, he tratado de conducirme en mi vida profesional. Siempre me rodeé de los mejores,  aquellos que unían las más altas calificaciones por su paso universitario y preparación académica con la pasión ejercida y desafiante de cada emprendimiento, con el esfuerzo de saber que no basta una buena lectura de una norma, sino se agrega el plus del empuje y espíritu rebelde para comprender íntimamente, cuál es el problema y el examen a resolver. Aprendí que las horas de desvelo ayudan a desarrollar en el cerebro lúcido pero perezoso una inteligencia  sostenida en el tiempo. El compromiso con la vida comprende también en sus horas pertinentes, el compromiso con la labor elegida, con el trabajo encomendado.

Sin pasión, no entiendo mi profesión. En realidad, no entendería ninguna profesión. Por eso, trato de llevarla a la práctica habitual e inculcarle cotidianamente estos valores a mi gente. LA EXCELENCIA en definitiva no se proclama, se ejercita, como parte de nuestros esfuerzos para alcanzar valores superiores. Cada uno de los servicios que se emprenden, deben contener el sello de la mayor dedicación, el mayor esfuerzo y la pasión puesta al servicio de quien nos contrata.

RIVEIRO Y ASOCIADOS cumple 34 años de ejercicio profesional y me ha tocado en suerte dirigir su destino. Nuestro “expertise” en materia impositiva y contable, no resulta fruto del azar, sino de los valores humanos y la capacidad intelectual sumada a la pasión ya descripta a través de los años, de los profesionales que componen los cuadros del Estudio, desde los socios hasta el último asistente que acaba de incorporarse.

AUDITORÍA e IMPUESTOS como servicios globales y TRIBUTACIÓN INTERNACIONAL y PRECIOS DE TRANSFERENCIA como áreas especializadas, nos han dado un nombre en el mercado argentino.  No somos grandes, aunque en otrora tiempo, hemos sido capacitados por ellos; ni pequeños, aunque hemos aprendido el trato personal que dispensan y que tanto conforma al cliente; ya no es cuestión de tamaño, sino pretender, sin soberbia,  ser relevantes profesionales en la materia, por dos motivos: sentir orgullo y satisfacción por nuestro trabajo y forma de encarar nuestra vida laboral y por quién nos contrata y ha depositado su confianza en RIVEIRO Y ASOCIADOS.

Nuestra meta es capacitarnos día a día, para comprender y acompañar a nuestros clientes, tratando de solucionar los problemas del hoy, que seguramente serán mucho más fáciles que los que se presentarán mañana, y que nos obligarán a un nuevo desafío. Estamos obligados a comprender el negocio real del cliente antes de balbucear siquiera una primera respuesta apresurada.

Por eso nos aceptan, por eso nos aprecian. Observan en silencio que no buscamos desprendernos del tema a cualquier precio, sino entenderlo seriamente y encontrar los argumentos correctos. Con el mismo fervor, que si se tratara de un problema personal e íntimo que perteneciese a cada uno de nosotros. Éste es el esfuerzo cotidiano de los profesionales de RIVEIRO Y ASOCIADOS. Ésta es nuestra pasión.

Como siempre dicen los hijos pero de sus progenitores ya ausentes, mi padre era un sabio, lástima que me di cuenta tarde…, en mi caso, yo  lo intuí desde el primer día.

RICARDO ENRIQUE RIVEIRO